¿Cómo ahorrar plata en su próxima factura de luz?
El ahorro en el consumo eléctrico es algo que preocupa a muchas personas, algo que realmente no debería asombrarnos, habida cuenta que año tras año contamos con más y más productos y tecnologías que inciden poderosamente en nuestra capacidad de ahorro: televisores, aires acondicionados, lavarropas, computadoras, tablets, sistemas de videojuego, muchas veces trabajando de manera conjunta y sostenida en el tiempo, volviendo cualquier hogar de nuestro país en una especie de vampiro voraz, insaciable, que siempre exige más.
Más allá de que como ciudadanos es realmente vital asumir una actitud responsable con respecto al consumo energético de nuestro hogar, sobre todo no derrochando energía sin sentido al iluminar habitaciones donde no hay nadie, o incluso dejar las luces encendidas cuando salimos, hay algunas pequeñas cosas extras que podemos hacer: hábitos y costumbres, en parte, que nos permitirán obtener un buen grado de ahorro en nuestro consumo energético sin disminuir el uso habitual que hacemos de nuestros aparatos eléctricos. Creo que en ningún otro terreno es aplicable esta posibilidad, quiero decir, reducir el gasto sin ceder en nada la cantidad de luz y energía que necesitamos para que nuestro hogar siga en perfecto funcionamiento.
El primer consejo para que ahorres plata en tu próxima factura de luz claramente tiene que ver con la instalación de lámparas de iluminación de led en toda la casa. Sin dudas este es un factor que tendrá un enorme impacto a la hora de realizar un tipo de ahorro efectivo y visible en el consumo eléctrico. Las luminarias led tienen un gran rendimiento y confiabilidad, incluso si las comparamos con las lámparas tradicionales. Además, la tecnología led se adapta a prácticamente cualquier estilo de diseño de interiores, logrando así un tipo de iluminación cálida, o fría, según el caso, verdaderamente funcional. Debido a su gran porcentaje de eficacia en el consumo energético el usuario logrará una tasa de ahorro considerable, y lo mejor de todo, sin resignar calidad en la iluminación de su casa. Con solo pasar de nuestras viejas lámparas a un tipo de tecnología led ahorraremos muchísimo dinero por año.
También tenemos por allí algunos dispositivos de última generación pero que poco a poco se han ido popularizando entre los distintos perfiles de consumidores. En definitiva, la necesidad de ahorrar nos iguala a todos. Por ejemplo, podemos considerar la opción novedosa de los llamados detectores de presencia. ¿Qué son? Esencialmente se tratan de dispositivos que mantienen un nivel de iluminación que el usuario prefija con anterioridad, la base lumínica, por así decir, también con tecnología led, lo cual puede amplificar sus posibilidades de ahorro.
Otra buena opción para reducir el rango de consumo eléctrico es instalar interruptores de luminosidad en ambientes donde no siempre es necesaria la misma frecuencia lumínica, también llamados interruptores crepusculares. Algunos de ellos vienen con sensores integrados que detectan de forma continua el grado de iluminación natural del ambiente en el que estén instalados, lo cual les permite ajustar la intensidad lumínica, por ejemplo, en un dormitorio con la ventana abierta durante el día. Si bien estos artefactos requieren algún tipo de gasto para adquirirlos e instalarlos, podemos pensarlos como un tipo de inversión que se traducirá en una buena cantidad de ahorro a corto, mediano y largo plazo.
Existen, además, dispositivos inteligentes que se ajustan al grado de luminosidad pero que también pueden ser programados con anterioridad por el usuario. Hay modelos realmente excelentes y a un precio más que razonable que saben detectar con precisión cuándo la fuente de luz natural es insuficiente, aumentando de forma progresiva su intensidad de luz artificial. Con esta sencilla aplicación podemos lograr un impacto increíble en nuestros niveles de ahorro: evitaremos que las lámparas trabajen siempre al máximo de sus posibilidades. El hecho de que sean programables nos permiten, además, controlar los límites que deseamos obtener en cada ambiente en particular y en horas determinadas.
Como vemos, existen muchas formas en las que podemos reducir los gastos en nuestra factura de luz. Desde luego, no es necesario aplicarlas en su totalidad para obtener grandes resultados. El cambio, en cualquier caso, puede ser progresivo, rediseñando el perfil eléctrico en la iluminación de cada ambiente. A todo esto hay que sumarle una fuerte toma de consciencia de parte del usuario. Al ahorrar en nuestro consumo de energía no solo estamos reduciendo los costos mensuales en electricidad sino que ayudamos a que la red de suministro no colapse, casi siempre, en los momentos más inapropiados. El consumo responsable es también una forma de educar a nuestros hijos como ciudadanos.
